
CONCEPTOS BÁSICOS
La violencia contra la mujer es un hecho que perturba a la sociedad, porque es una problemática que, si bien es cierto, se tiene cierta idea de la gravedad que conlleva, se debe conocer qué es agresión. Este término se define como las dificultades sociales que no se mencionan hasta que se toman en serio como un problema. Muchas de las mujeres de hoy en día no se atreven a denunciar este hecho, pese a que existen programas de apoyo para las mujeres maltratadas que no siempre son escuchadas. La agresión a mujer no es un tema que se deba tomar a la ligera, ya que a la larga genera muchas consecuencias como los daños psicológicos que les puede causar. Muchas de las mujeres golpeadas actúan mucho a la defensiva y le tienen temor a todo su entorno, debido a que en su mente posee un trauma. Estas agresiones se pueden dar de muchos tipos. A lo largo de los años, la sociedad se las ha ingeniado para crear más formas de maltrato a las mujeres. Primero, la forma de maltrato más común es violencia física, que es por la que más se lucha actualmente para que ya no sea ocasionada, porque, año tras año, se producen casos de mujeres con la cara totalmente destrozada. Segundo, existe una violencia denominada psicológica. Esta también es de las más comunes, pero no es muy evidente para muchos. Esto causa daños y genera desconfianza en las mujeres. Tercero, la violencia sexual afecta también a muchas mujeres. Ellas no son capaces de denunciar este hecho por amenazas del agresor o el miedo al qué dirán. Por último, otro tipo de violencia que actualmente se está haciendo más evidente en la violencia laboral, que afecta a muchas mujeres de hoy, porque son agredidas en su centro laboral por el simple hecho de ser mujeres e, incluso, se sigue viendo que el sueldo de las mujeres en la mayoría de trabajos es inferior al de los hombres, pese a que tienen el mismo cargo laboral.

En está imagen se puede apreciar a un hombre acosando y agrediendo a una mujer, ella se cubre la cara para evitar más golpes de dicho agresor.
antecedentes

En esta imagen se puede apreciar a las mujeres en la lucha por el voto femenino, en plena corte muchos caballeros intentan cesarlas de muchas formas.
Desde hace muchos años, el tema de la agresión a la mujer ha estado vigente. Incluso, la problemática era un hecho mucho más impetuoso, pero nadie en la antigüedad creía que era un problema, ni las mismas mujeres lo creían, ya que era un acto normal tener a una mujer al antojo del hombre. En la Edad Antigua, las mujeres pasaban por los peores momentos de la agresión, ya que para la sociedad no tenía derecho alguno y tenían que hacer los que el hombre les indicará. Por ejemplo, en la antigua Grecia, la mujer era usada netamente como esclava, y siempre eran sometidas y humilladas. En la antigua Roma las agresiones no varían mucho. La mujer era sometida por un hombre que podía ser su esposo y era obligatorio que esté en el hogar con sus hijos. Por ese motivo, por ninguna circunstancia, podía trabajar. En la Edad Media, la Iglesia católica estuvo en contra del empoderamiento de la mujer, incluso de la discriminación, marginación y violación de los derechos humanos de la mujeres. En la Edad Contemporánea, con la sociedad consciente de que existe la discriminación a la mujer, se generaron otros tipos de violencia, ya que la mujer tuvo mayor protagonismo en muchos aspectos y muchos filósofos de la época citaban su rechazo hacia ella. Por último, en la Edad Moderna, las circunstancias ya habían cambiado un poco. Las mujeres no podían pertenecer al ejército, pero ya empezaban a empoderarse algunas como Juana de Arco que perteneció al ejército.
ACTORES
En la problemática de la violencia contra la mujer se presenta varias figuras, en las cuales presentaremos a continuación. Principalmente tenemos al principal causante de este caso, conocido en este tema como “el hombre violento”, es decir, es él el agresor hacia las víctimas. Ya que muchos de sus casos están relacionados con el machismo; esto se debe a la informalidad que hubo desde antes con el maltrato a la mujer, está claro que en ese momento se tomaba esta actitud como algo natural. Pero actualmente se da un gran debate acerca del machismo, tanto que a los hombres cuando se les acusa de opresor, ellos suelen dar una justificación de ser el género más fuerte. Aunque, también critican y discriminan en ciertos puntos; ya sea laboral, estudios o gustos que se caracterizan por ser muy masculinismo. De acuerdo a lo dicho, hablaremos de la mujer que es la afectada en todo este problema. Se les causa tres puntos específicos que son daño psicológico, daño físico y temor. En primer lugar, tenemos al daño psicológico, se presenta la baja autoestima y desordenes emocionales; ya que el agresor acude a prohibiciones, coacciones, intimidaciones y amenazas. Por otro lado, la violencia física contra la mujer se conceptualiza actualmente como un problema de violación de derechos humanos. Este fenómeno social fue abordado como problema en la Conferencia Mundial de Viena en 1993, lo que se da a entender que ella es víctima de lesiones como moretones y roturas de huesos. Lo cual esto lleva al otro punto que es miedo; por lo personal el miedo es la mezcla de las agresiones psicológicas y físicas que suelen presentarse, esto lleva mayormente a las faltas de denuncias. Entonces, el Estado es el responsable de que se pueda frenar esta problemática; ya sea, dando una sanción más drástica para al agresor o ir informando a escuelas o centros educativos sobre la inmoralidad que se está viviendo.

Aquí se puede apreciar como el hombre es perdonado por las mujer y le da la confianza de que no volverá a pasar.
DATOS ESTADÍSTICOS

En la imagen se puede observar un gráfico circular que representa estadísticamente el porcentaje de agresiones contra la mujer según su relación con el victimario.
En los últimos años la problemática de la violencia contra la mujer en el Perú ha tenido mayor atención, ya sea por los movimientos feministas o por la visibilidad de diversos casos perturbadores. Por ello, frecuentemente se realizan estudios que permiten determinar porcentajes aproximados de incidencia de agresiones, agresores y su relación con la víctima. Primero, los estudios revelan que el 77% de las agresiones son realizadas por parte de personas muy cercanas a la afectada, en su mayoría pareja o expareja, esto deja entrever que la mayor parte de los crímenes tiene motivos pasionales, por ello es importante mantenerse alerta ante cualquier actitud de amenaza. Segundo, el 18% de las agresiones son realizadas por un miembro de la familia, lo que evidencia que también existe riesgo de maltrato en lugares que son considerados seguros para las mujeres; es por esto que se debe mantener una posición preventiva ante cualquier comportamiento extraño que pueda poner en riesgo la integridad femenina. Tercero, el 5% de las agresiones son realizadas por un completo desconocido, al contrario de lo que se cree, las agresiones realizadas por desconocidos son menos frecuentes, teniendo lugar, en su mayoría, en la calle; por lo tanto, es de suma importancia tomar las medidas de precaución necesarias antes de exponerse a situaciones de riesgo.
ejemplos
La violencia a la mujer es uno de los problemas con mayor incidencia en el Perú. Esto se manifiesta de diversas formas, entre ellas se encuentran los casos que describiré a continuación. En primer lugar, uno de los casos más indignantes para el país es el caso de María Jimena que tuvo lugar en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho el primero de febrero del 2018. César Alva interceptó a la niña de 11 años mientras ella se dirigía a un taller artístico, la atropelló con su bicicleta para lastimarla y luego secuestrarla bajo el engaño de llevarla a su casa; en el trayecto, se desvió teniendo como destino un lugar desértico donde la violó, la estranguló hasta matarla y le prendió fuego al cadáver. El asesinato de Jimenita es un ejemplo directo de la violencia ejercida en contra de las mujeres, en este caso, las niñas. En segundo lugar, otro caso ocurrido también en el 2018 es el caso de Eivy Ágreda, la joven a la que su acosador Carlos Hualpa le prendió fuego mientras se encontraba en un autobús, la víctima terminó con el 60 % de su cuerpo quemado y agonizó durante meses hasta morir. Este suceso evidencia el argumento de que ser mujer en el Perú es un peligro. Por último ,el mediático caso de intento de feminicidio cometido por parte de Adriano Pozo Arias en contra de Arlette Contreras en el año 2015, las cámaras de seguridad registraron el brutal ataque en el lobby de un hotel; se observa al agresor golpeando y arrastrando del cabello a la víctima. Este acontecimiento; aún cuando, a diferencia de los anteriores, no termina en feminicidio, es uno de los casos de maltrato más comunes y refleja la situación de atropello que viven a diario miles de mujeres peruanas.

En la imagen se puede observar al agresor de Jimenita, el momento del secuestro y la foto de la víctima